Suspenden a Omar Romay de la directiva de América TeVé


MIAMI.- ALBERTO MONTALTI
amontalti@diariolasamericas.com
@montalti92
Omar Romay y su hijo Damián fueron destituidos de todos sus cargos en la directiva del canal América TeVé y se les prohibió la entrada a sus instalaciones, luego que el abogado interventor Pedro Roig obtuvo la aprobación de la moción que presentó, como parte del proceso judicial que la televisora afronta con la firma demandante Caribevisión Holding Inc.
Según aseguró a DIARIO LAS AMÉRICAS el abogado de Caribevisión, Marcell Felipe, Roig presentó la moción para despedir a Romay de sus cargos como director de dirección y programación, y a Damián Romay de su cargo como director de entretenimiento.
A principios de esta semana, la magistrada Mónica Gordo aseguró que esa decisión estaba en manos de Roig y que la moción era prácticamente innecesaria. El pasado miércoles 18, Roig decidió retirar a los Romay de todos sus cargos ejecutivos, aunque estos aún son dueños del 50% de las acciones del canal.

La evidencia
Según el abogado Felipe, a mediados de mayo de este año, cuando el equipo de interventores se instaló en las oficinas de América TeVé por orden judicial, sus expertos de sistemas de informática encontraron rastros que confirmaban que alguien había introducido un programa que pudo ser utilizado para espiar cuatro computadoras.
“La evidencia es bastante obvia y clara de que sí hubo hackeo”, aseguró el abogado.
El programa Net Support fue instalado en “stealth mode”, o “modo sigiloso”, en las computadoras de dos contadoras del equipo de intervención, la representante de Caribevisión, llamada Ana Cristina Castilla, así como el ordenador del periodista Juan Manuel Cao.
Según explicó Felipe, esto significa que alguien tenía acceso a las cuatro computadoras desde otro ordenador.
“Luego se determinó que el programa se instaló bajo el nombre de usuario de Simón Bolívar, quien era el ‘IT’ (experto de sistemas) de Romay, contratado en abril, cuando Romay aún controlaba la empresa”, aseguró Felipe.
Además, narró el abogado, inmediatamente después de la llegada del equipo de Roig, el disco duro de computadora de Romay fue retirado de su ordenador y al día siguiente sucedió lo mismo con el disco duro de Marcelo Soldano, su contador principal.
“Hasta este momento (Romay) no ha entregado una copia de su disco duro a Caribevisión”, dijo Felipe, aunque recientemente sí entregaron una copia a los interventores, “no sé qué estará escondiendo”, agregó.
Aunque esta evidencia no fue utilizada durante el juicio contra Romay, que resultó en la decisión del jurado de exigir el pago de casi 59 millones de dólares a Caribevisión, sí será relevante en una audiencia que se llevará a cabo el próximo 30 de noviembre, en la que Romay deberá defenderse de la interferencia de la cual le acusa Roig.
El equipo legal de Caribevisión espera que la audiencia resulte en una penitencia que invalide la defensa de Romay para sus futuras apelaciones, pero si esto sucede ería una decisión radical de la jueza Gordo.
“Es un recurso para castigar a quien ha obstruido la justicia por alterar la evidencia”, argumentó Felipe.
“Sus acciones comprometen la integridad del sistema jurídico. El que viole el sistema se merece el peor castigo”, señaló.
Con el “castigo peor” Felipe se refiere a que Caribevisión gane automáticamente cualquier futura apelación del caso contra Romay, lo que probablemente significaría que la propiedad y el control definitivo de América TeVé pasarían a manos del demandante como parte del pago de la compensación.
Evidentemente interesado en tranquilizar a los empleados del canal, tras meses de incertidumbre, Felipe enfatizó las intenciones de sus clientes de apoyar el normal  funcionamiento de la televisora.
“Queremos invertir en el canal y que siga adelante. Ése es el mensaje que transmitimos a la comunidad y los trabajadores de la empresa”, dijo Felipe.
“Ellos [los Romay] están diciendo que sin ellos no habrá suficiente dinero para pagar todas las nóminas. Eso categóricamente no es cierto”, sentenció.

Comentarios