No solamente existen las llamadas "jineteras" en el Malecón de La Habana a todas horas del día y de la noche, ni en el Paseo del Prado, ni en las áreas hoteleras del Vedado, o las playas de Santa María del Mar o Varadero donde acude el turismo sexual proveniente de Canada, Europa , Mexico y Brasil. También existe una nueva modalidad de jinetera, a la que yo le llamo "jinetera ideológica", que son las que han sido creadas y entrenadas para ocupar diferentes posiciones en el frente ideológico al servicio de la Revolución castrista, pero fingiendo que son opositoras al regimen, para de esa manera poder establecer un nexo de convicción ideologica entre el mensaje que el castrismo quiere que se propague y las diferentes sociedades del mundo libre que les sirva de apoyo, a la vez que les refuerce la imagen y así poder penetrar dentro de las diferentes estructuras organizativas del exilio histórico cubano anclado principalmente en Miami y New Jersey. En los comienzos de sus labores por la llamada "causa de la libertad de Cuba" , que ni remotamente es tal, suelen mostrarse muy humildes y participativas con el exilio en general, aceptando toda clase de invitaciones, donaciones y ayudas para la cusa y de esa manera lograr cada vez mas la fuerza necesaria para ir ostentando a la vez mucho mas protagonismo dentro y fuera de Cuba y granjearse la confianza de su Comandante en Jefe , el segundo al mando en la tiranía , Raúl Castro, y de esa manera disfrutar del "banderín abierto" que les otorga la seguridad del estado cubano para que entren y salgan del pais cuantas veces sea necesario , con toda la supervisión y ayuda necesaria de los agentes de esa seguridad cubana por todas partes del Mundo donde la "jinetera ideológica" vaya a ejecutar su labor.
Personalmente nunca creí en Berta Soler desde la primera vez que la escuché hablar y poder verla en fotos y vídeos. ¿Por que? Porque me es muy fácil detectar a ese tipo de personajes. Ninguno es convincente, y todos, aunque muy bien entrenados por las fuerzas de inteligencia castristas, adolecen de un problema muy grave que les es innato y es parte de la genética castrista en todos esos individuos y es el patrón de sus lenguajes y la psicología del personaje que interpretan. No son fieles a ningun principio mas que al USDollar que tienen que conseguir a toda costa para llevarle al amo. Sé que me van a crucificar y hasta demonizar por estas redes sociales muchos de los que ya lo hicieron una vez cuando abrí una caja de Pandora que nadie se atrevía a hacerlo. Es bochornoso y hasta despreciable que esa jinetera llegue a Miami , a la capital del exilio cubano a jinetear a exiliados que le abren los brazos y los micrófonos y le den el derecho a expresarse en entrevistas , aún a sabiendas de lo que ella esta haciendo con dolares que salen de los "Federal Grants" que son en definitiva los dolares del impuesto a nuestro sudor y el sudor de todos y cada uno de los americanos que vivimos en los 50 estados de la Unión y que no tienen la mas mínima idea de quien es la jinetera en cuestión y a lo que se dedica con el dinero de todos, para que al final , ella enarbole con orgullo e inmunidad de su jineterismo parlamentario que le han permitido muchos personajes del exilio la chocante frase : " No voy a aceptar que nos den ordenes los que viven afuera".
Esa es exactamente las palabras que el tirano comandante en jefe de la jinetera Berta Soler quiere escuchar que se nos restriegue a la cara, mientras somos todos nosotros los que a través de ella contribuimos de alguna manera a la causa del cambio-fraude. La jinetera preferida de Raúl Castro nos está haciendo cómplices a todos de la permanencia del castrismo a través de nuestros impuestos y los Federal Grants.
No se trata de dividir, como algunos dialogueros en el exilio suelen criticarme y aducirme cuando soy yo quien digo verdades, que a ellos no les conviene que se digan ni se publiquen, sino simplemente se trata de algo muy grande que no todos saben llevar por dentro: DIGNIDAD.
Quien no tenga dignidad, entonces que continúe haciéndole apologías a la jinetera de marras, incluidos senadores y congresistas que la han paseado y exhibido ante el congreso americano y encumbrado sin recato ni escrúpulos.
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