Es sabido que en Cuba a los extranjeros de la talla de Obama y demás, solo tienen derecho de ir a compartir con ellos los señores militantes del Partido Comunista y la Juventud (Union de Jóvenes Comunistas). Nada nuevo, un re descubrimiento del agua tibia. MB---------------------------------------------
Los preparativos para el juego de béisbol entre los Rays de Tampa Bay y la selección cubana, dejan entrever cuál es el rostro de la sociedad civil que Raúl Castro quiere que vea el presidente estadounidense, Barack Obama, durante su visita.
El acceso al Estadio Latinoamericano, que aún se encuentra en fase de restauración y acondicionamiento para celebrar el juego del próximo 22 de marzo, será mediante acreditación rigurosamente controlada, una "tarea que ha sido orientada a los cuadros del Partido [Comunista de Cuba]", señalan varias fuentes.
Un obrero de la fábrica de tabacos La Corona reveló que para obtener una acreditación "tienes que dar tus nombres, apellidos y carné de identidad; por tanto, estas invitaciones son intransferibles. En la selección de trabajadores tienen prioridad los miembros del Partido y la Juventud [Unión de Jóvenes Comunistas]; después, los obreros cumplidores y destacados considerados 'confiables'".
"Junto con la invitación te dan una serie de indicaciones, todas de carácter prohibitivo; además, nos dijeron que otras orientaciones serán informadas en próximos días", dijo Saylí Peralta, trabajadora de un policlínico en Nuevo Vedado.
"Tenemos que estar dos horas antes de iniciar el juego y no se puede salir hasta el final. Tampoco se puede gritar, e incluso hay rumores de que no se podrá entrar al estadio con celulares", añadió.
Estas restricciones responden a "mecanismos históricos del régimen cubano para movilizar a las organizaciones de masas, que en realidad no encarnan ni el espíritu ni los intereses de la sociedad civil", advirtió la periodista independiente Lucía Corrales.
"Con este control en la acreditación, que deberá ser mostrada junto al documento de identidad, evitan que ningún activista de la oposición participe del espectáculo. Tuve esperanzas de que el acceso fuera libre; organizado, pero libre", dijo Corrales.
Fuentes del Instituto Superior de Cultura Física Manuel Fajardo confirmaron que a este centro le fueron asignadas unas 300 acreditaciones. Las "orientaciones" que recibieron coinciden con las señaladas por otros consultados.
"No se puede llevar gorras, no se puede gritar, hay que devolver las pelotas que caigan en las gradas, y advirtieron que si tienes problemas de salud mejor ni vayas. No logro entender el porqué de estos sinsentidos", dijo un entrenador de natación que pidió no ser identificado.
"No iré al juego porque realmente me parece vergonzoso, en primer lugar, el proceso para la acreditación y, en segundo lugar, en solidaridad con muchos de mis compañeros, entrenadores de otras disciplinas, que también trabajan en pésimas condiciones y sin recursos", afirmó. "Nos merecemos mucho más que este chequeo grosero".
Lo que se supone será un encuentro de exhibición amistoso, se ha convertido "casi en un secreto de Estado, que empezó con el súper control de las acreditaciones", añadió una trabajadora de la Casa Consultora DISAIC.
"No se sabe a qué hora comenzará el encuentro, no se sabe si repartirán gorras, merienda, agua (…) porque nos indicaron que no se pueden llevar 'bultos' ni celulares. Tampoco sé cómo carajo van a llenar el Latino, porque 55.000 personas se van a obstinar de tantas prohibiciones y no querrán ir", dijo la empleada.
Aunque la prensa estatal no ha emitido ninguna declaración, ni "la alta dirección del Partido" se ha pronunciado respecto a si habrá acceso libre, se ha podido confirmar que centros laborales de territorios cercanos —Cerro, Plaza, Centro Habana— están siendo acreditados, y se prevé una movilización "convocada por las direcciones provinciales de los CDR, FMC, FEU, FEEM, FAR y MININT".
"No sé por qué tanta sorpresa y tanta algarabía con el tema de las acreditaciones, esa medida era de esperar", opinó Ariosa, un exoficial del Departamento Técnico de Investigaciones (DTI).
"Eso es lo malo del cubano, su falta de memoria. Parece que olvidaron el juego contra los Orioles de Baltimore en 1999. Fue lo mismo, aunque es justo hacer la salvedad de que las invitaciones no tuvieron el mismo control de estas ahora. Recuerdo que pude conseguir dos para mis sobrinos", afirmó.
"La explicación es simple, al requerirte tus datos completos evitan que puedan saltarse el control personas indeseables; es decir, los llamados disidentes, que pudieran poner malo el ambiente ante la presencia de Obama", concluyó.
Por su parte, un veterano de la guerra de Angola, exdirigente de la Asociación de Combatientes, opinó que "Obama tiene el derecho a saber cuál es la 'sociedad civil' que asistirá al Latino".
"Aquí los derechos ciudadanos se violan, no importa que vengas de la luna o que seas el presidente de Estados Unidos", dijo. "Lo que más duele es que ayer nos obligaron a gritar improperios al imperialismo y hoy nos obligan a guardar silencio ante el mismo enemigo que nos enseñaron a odiar".
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